ADIÓS BERLANGA,
ADIÓS (no el cineasta, el del Uranio!)
Ayer y hoy nos
hemos desayunado con la gran noticia de que nuestro querido Sr.D. Director
Gerente José Vicente Berlanga Arona nos deja para incorporarse a la empresa semipública
ENUSA. Nada más y nada menos que consejero pero con vistas de ser el nuevo
presidente de la compañía en un futuro. Una empresa con dos áreas de negocio:
nuclear (uranio enriquecido) y medioambiental, qué qué!
Quién
nos iba a decir que nuestro querido Sr. D. Director Gerente iba a llegar tan
lejos cuando compartíamos mesa de negociación de convenio y otros menesteres,
ahora ya sin importancia, en la FDM. Quién nos iba a decir, con el gran revuelo
que causó su salario debido al porcentaje de trienios de antigüedad, que ahora
iba casi a triplicar esa cantidad sin que se le moviera un pelo de la cabeza.
Dónde
está el gran discurso de nuestros gestores socialistas de que era un
despropósito la cantidad que cobrábamos por el concepto de antigüedad, del todo
insostenible para el funcionamiento de este organismo, un organismo público,
por otro lado, como ENUSA. Parece ser que nuestro Sr.D. Director Gerente ha
hecho más que méritos como para que
nuestro querido Ministro de Fomento, que també es de la terreta, se lo llevara
a Madrid a expandir sus dotes de gestión.
Dotes
que nos han llevado a un funcionamiento precario, como la antigüedad que vamos
a cobrar a partir del año que viene, donde las instalaciones se mantienen por
la voluntad del personal de la instalación, que no de los mandos de éstas. A
las pruebas me remito. Hemos estado varios meses sin la figura de director de
instalación en al menos cuatro instalaciones, funciones que por otro lado asumió una persona de oficinas y el
servicio ha salido por el personal, es decir, por los auxiliares de servicio y
algunos encargados, ya que hay sitios que ni encargado tienen.
Seguimos
funcionando en verano con una precariedad a nivel de personal que sólo se ha
visto el año pasado cuando la no previsión de los responsables hizo que se
tuvieran que cerrar algunas instalaciones por falta de personal.
Una
gestión socialista que nos ha tenido más de dos años negociando un convenio
socialista que buena parte de los miembros que hemos estado en el proceso (aunque
no la mayoría numérica del Comité de Empresa obviamente) hemos expresado que
únicamente se debía a intereses políticos y personales y no a la preocupación
porque esta entidad funcione como debe. Hemos tardado poco en ver cuáles son
los frutos de esta gestión y cuáles son los premios por el trabajo. Una
curiosidad, 210.000€ al año (según publica el Levante hoy) vienen a ser 15000€
en 14 pagas, si tienen 14 o bien 14.000€ si en ENUSA conservan las 15 pagas
(que tiemble el personal de ENUSA!), calderilla. Según el periódico, el Sr. D.
Director Gerente de la FDM va a pasar a formar parte del exclusivo selecto
grupo de directivos de entidades públicas mejor pagados de este país. Ahí queda
eso.
Si
hubiera habido algo de interés en que la cosa funcionase mínimamente no
estaríamos en esta situación. Instalaciones faltas de personal, trabajo no
coordinado, tres años sin tener una equipación completa de ropa ni en tiempo ni
en forma, etc, etc…
Y
yo me pregunto, a l@s compañer@s que han apoyado la firma de este estupendo
convenio, donde se nos han modificado a peor (desde mi punto de vista) tanto
las condiciones económicas como las laborales, ¿siguen teniendo energías para defender
el resultado? ¿Seguirán pensando que esto es lo que se debía negociar y
conseguir y que todo era por el beneficio de la fundación y la sostenibilidad
de lo público? ¿En serio? ¿Hay alguien que no se ha dado cuenta aún de que toda
esta estrategia, además de directrices estatales (y del PP) de solucionar el
alto porcentaje de interinidad en las administraciones públicas, era por
cuestiones políticas y beneficios personales?
Tal
vez este tema de puertas giratorias nos haga reflexionar un poquito sobre cómo
se funciona en las altas esferas de gobierno y de qué es lo que no hay que
hacer para conseguir que realmente los intereses del personal de plantilla, de
los de abajo, primen ante los políticos y personales. Para eso lo único que se
debe mantener es una unión, una fuerte unión ante las ofensivas de los
mandamases de turno que siempre van a plantear cambios de dudoso beneficio para
la clase trabajadora. No hay más. Y eso es justo lo que no ha ocurrido en la
fundación, siempre desde mi humilde opinión, claro.
Sólo
deseo que la persona que ocupe su lugar muestre algo de interés, aunque sólo
sea durante el año que queda antes de las elecciones. Interés por saber de qué
va este organismo y de cómo puede ir mejor para todo el mundo, personal y
usuari@s.
Fdo.: Guaditoca
Blanco Rojas.